El mítico circuito del Jarama, en actividad desde 1966, cuyos 3.850 metros de pista fueron ya escenario de competición entre maquinas y pilotos de las categorías reinas del motor como la F1 o Moto GP, acoge anualmente una de las pruebas puntuables para el FIA-Campeonato de Europa de Camiones de Carreras: el Gran premio del Camión de España.
El piloto alemán Jochen Hahn, llegaba al Jarama como líder del campeonato europeo con 19 puntos de ventaja sobre el madrileño Antonio Albacete y además con el valor añadido de que esta es la penúltima prueba del certamen que llegará a su final en el circuito francés de Le Mans. Albacete jugaba en casa y tenia las gradas a su favor, pero lo mismo no fue suficiente para que pudiera arrebatar el liderazgo a Hahn sino que además, al término de las cuatro carreras del fin de semana, este se marchaba de Madrid ampliando en 10 puntos su ventaja lo que obligará a posponer la decisión del título para tierras galas, donde llegarán separados por tan solo 29 puntos, de un total de 60 otorgados en cuatro carreras con un valor individual de 15.
Durante la jornada de sábado, Antonio Albacete acusó algunos problemas de tracción en su MAN y vio la bandera a cuadros por dos veces en segundo y cuarto puestos respectivamente, mientras que su máximo rival lograba una victoria y un tercer puesto. El equipo Cepsa, puso todo de su parte para dar solución a los problemas del vehículo de Albacete de cara a domingo, pero aun que pudo reducir la ventaja, ello no fue suficiente para vencer la superioridad del alemán. En la primera carrera Hahn salió en la pole y no cedió su puesto durante las 12 vueltas al trazado obligando a Albacete a seguir su eje trasero hasta el final; en la segunda (a parrilla invertida), Norbert Kiss (ganador de la segunda carrera de sábado) quedaba primero seguido de Adam Lacko y Antonio lograba el tercer puesto manteniendo a Hahn pegado a su camión sin cederle ni un solo centímetro de pista durante 12 interminables vueltas. En Le Mans se decidirá el titulo de campeón europeo, en otra final contra Alemania…
Estos verdaderos monstruos con cerca de 5.000 kg de peso y 1.400 Cv de potencia, aun estando limitados por GPS a una velocidad máxima de 160 km/h, propician un espectáculo único y verdaderamente impresionante sobre la pista que en demasiadas ocasiones se les hace demasiado estrecha, pese a los 9 metros de anchura con que cuenta el trazado madrileño. Por otra parte, no todos los pilotos de los 35 de formaban la parrilla, venían a Madrid a competir por cosas importantes con lo que su intención era, (y fue conseguida), la de regalar buenos y emotivos momentos al público y disfrutando ellos en la cabina. La representación española contaba con nombres como Pedro Ignacio García Marco, David Felipe Plaza, Adam Lacko, los hermanos Vila y Orlando Rodriguez, logrando algunos meterse en los puntos, y los que no, se sumaron al francés Olivier Buzigue y a los portugueses Eduaro y Jose Rodrigues (padre e hijo), en eso de “pasármelo bien y dar espectáculo”, lo que lograba propiciar momentos excepcionalmente emotivos en las gradas y bastantes Gb de fotos y video.
Más que dos días de carreras, estos son dos días de fiesta, de la fiesta del camión y que según datos oficiales obtuvo una afluencia de cerca de 32.000 espectadores en el Jarama, prueba de que el circuito madrileño no está en edad de jubilación y para que siga vivo apenas necesita la organización de eventos deportivos capaces de atraer al público.
Otro de los momentos que hacen las delicias de pequeños y adultos, es el desfile de camiones americanos donde se han podido ver desde autenticas joyas genuinamente americanas, hasta modernos camiones exhibiendo decoraciones artísticas impresionantes y aun algunos abuelos de las carreteras españolas.
Antonio Albacete terminará en Le Mans, el día 14 de Octubre, como en esta última imagen, por delante de Jochen Hahn y nos dará la alegría que no pudo darnos en el Jarama, trayendo para España el titulo de campeón europeo…
…es que últimamente, en otros deportes, Alemania no ha podido con nosotros… ¿y por qué no negarle una alegría a la señora Merkel?... ¡A por ellos, Antonio!!
Crónica y fotos: Jorge Ferreira
