Eduardo Noriego se convierte en el flamante campeón de la XVII Subida Algar, y lo hace tras sorprender al malagueño Gabriel Pastor, que en los entrenamientos libres del sábado había estado muy activo, logrando los mejores tiempos.
El piloto de Almendralejo volvió a mostrar su destreza a los mandos de su Mitshubishi Lancer y superó a Pastor en las dos mangas celebradas, con más de dos minutos de ventaja en el acumulado de la clasificación general de la carrera
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En Monoplazas también se produjeron sorpresas. Antonio Ruiz fue el mejor de los cinco participantes y subió a lo más alto del podio tras imponerse a Francisco Javier Pérez, que el día anterior había sido el más rápido en los entrenamientos libres. El de la Escudería Ubrique no pudo mantener el ritmo y tuvo que conformarse con la segunda posición.
En Monoplazas también se produjeron sorpresas. Antonio Ruiz fue el mejor de los cinco participantes y subió a lo más alto del podio tras imponerse a Francisco Javier Pérez, que el día anterior había sido el más rápido en los entrenamientos libres. El de la Escudería Ubrique no pudo mantener el ritmo y tuvo que conformarse con la segunda posición.
Lo más destacable de la jornada fue la salida del coche de Alonso Martín Torres, un Fiat Uno Turbo, que en la última curva del recorrido perdió el control y chocó contra su lado derecho, aunque no evitó que la prueba se desarrollarse con normalidad.
El algareño José Cabeza Saborido, en la primera manga oficial, a la altura de la gasolinera derrapó contra las barreras que separaban la carrera de los espectadores. Uno de los favoritos, Eduardo Jiménez, no pudo salir en las dos mangas oficiales ya que perdía gasolina. La decimoséptima edición de la Subida a Algar finalizó con éxito, aunque con menos afluencia de público que en ediciones anteriores. fuente: La voz digital