El deporte motor se daba cita el pasado sábado 22, en la Sierra Norte de Madrid para el primer Rallysprint El Atazar; evento puntuable para el Campeonato Madrileño de Asfalto y cabiendo por ello la organización a la Federación Madrileña de Automovilismo.
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| Foto: Jorge Ferreira |
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| Foto: Jorge Ferreira |
Daniel Marbán y Victor Ferrero, serian los primeros en tomar la salida con el Mitsubishi Evo X de preparación M Boss, pero un pequeño problema mecánico que provocó pérdida de potencia, hizo que terminaran el TC1 en la 16ª posición. La afición se llevó las manos a la cabeza, cuando les vio aparecer con poco gas y los intermitentes encendidos, pero para alegría de todos, la avería se ha podido solucionar en la primera asistencia y Dani pisó fuerte, marcando el mejor crono en las tres restantes pasadas, pero en consecuencia, la avería terminó por costarles la victoria en la prueba. Angel Domenech/Rodrigo Sanjuán que competían con una unidad también de la marca Mitsubishi, pero Evolución IX, se llevaron el gato al agua y al tercer cajón de la general se subirían José Marbán/Iñaki Páez en Seat Córdoba WRC… con tan solo once décimas de segundo separando padre e hijo…
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| Foto: Jorge Ferreira |
La lucha contra el crono se mantuvo por lo menos entre los diez primeros puestos, donde encontrábamos un reparto de actores muy conocidos del campeonato Madrileño. Eugenio Fernández/Andrea Fernández , quienes pese a que la mecánica del Peugeot 205 de Eficar pareciera no estar al 100%, lograron un meritorio cuarto puesto y brindaron la afición con un magnífico espectáculo; en quinto lugar se posicionaban Juan J. del Rincón/Javier Prieto en Citroën C2A2, seguidos de cerca por Pedro Flores/Miriam Vera en Renault Clio; (el piloto se mostraba muy satisfecho con este resultado, y confesaba que “lo mío son las subidas, no estoy acostumbrado a las notas”…), Rafael Esperilla – Martin Lumbreras se adjudicaban el séptimo puesto a los mandos del Renault Clio R3; David Perez/Jose L.S. Gijon con el Citroën C2R2 de la Escuderia Lemans marcaban el octavo mejor tiempo y en novena posición se colocaban Abraham Cabrera/Vanessa Valle en su ya casi mítica montura : el Renault 11 Turbo de Evolución A Competición, que puede ya presumir de matrícula de histórico y al que la afición cariñosamente dedica el apodo de “El abuelo”; finalmente la decena de mejores tiempos cerraba con Juan C. Fernández/Juan P. Sánchez en Peugeot 205 GTI.
Se registraron cuatro abandonos y de todos el más espectacular ocurrió tras una salida de pista, protagonizada por el Peugeot 106 Rally con el dorsal 17, de José C. Herráez/Alberto Casas, no habiendo afortunadamente que registrar mayores consecuencias que los daños del vehículo y el susto correspondiente.
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| Foto: Jorge Ferreira |
Se trataba de un tramo bastante rápido con una anchura de vía que permitía ampliar límites de velocidad, sin embargo y al contrario de otros eventos de esta naturaleza anteriormente realizados en El Atazar, esta primera edición del Rallysprint con el nombre de la localidad madrileña, estuvo exenta de protestas por parte de los lugareños porque no se les cortó el único acceso que tienen por carretera, quienes, incluso creo, han sabido dar todo un ejemplo de bien recibir a la familia de los Rallyes. La afición pudo, pues, disfrutar de una prueba con mucho espectáculo y competición, en un entorno de enorme belleza que caracteriza estos parajes de la Sierra Norte de Madrid, contando además con unas condiciones meteorológicas muy favorables; de la afición hemos de resaltar (restando unos pocos, pero MUY pocos), su comportamiento ejemplar tanto en cuanto al cumplimiento de medidas de seguridad, como al respecto al entorno medio ambiental. Se agradece ver que cada grupo, regresando a su vehículo al terminar la prueba, se hace acompañar por una bolsa plástica que contiene la basura generada… y digo que se agradece, no por agradarme a mi (que también) pero porque nos lo agradece a todos los aficionados, el deporte motor en general y los rallyes en particular. La afición a los rallyes es una mole humana que demuestra su fidelidad, y ejemplo de ello es que en esta fecha se realizaba un evento de cierto relieve en el Circuito del Jarama, pero esa costumbre de madrugar, llevar las sillas, la mesa, la sombrilla y esperar horas entre los pinos a pie de cuneta, hizo que no faltara ni uno en la Sierra… pues que no se guarden los enseres muy al fondo del trastero, que el 6 y 7 de Octubre habrá que darse cita en el XIX Rallye de la Diputación de Ávila, aun que quizá sea prudente llevar algo más de abrigo…
Crónica y fotos: Jorge Ferreira
