El fin de semana pasado, la temporada 2011 de las Le Mans Series llegaban a su final por tercera vez consecutiva, en un trazado luso, y si bien las dos anteriores lo fueron en Portimao, esta vez tocaba el mítico trazado de Estoril en una prueba de 6 horas.
En la clase LMP2 la cosa estaba muy fácil para los británicos de Greaves Motorsport, pues solo le faltaba un punto para convertirse en campeones, habiendo conseguido tres victorias en el campeonato que serian cuatro si contamos las 24 horas de Le Mans.
La otra categoría presente y participante era la Formula Le Mans la cual contaba con 4 equipos presentes, de los cuales el equipo Pegasus Racing, equipo que estuvo mucho tiempo en la categoría LMP2 sin conseguir éxito alguno, y al cual el cambio le ha sentado bien, era el claro favorito teniendo ya en el bolsillo el título de pilotos y el de equipos a un paso.
Y tras este pequeño análisis de cómo estaba la cosa antes de la carrera veamos lo que dio de sí la misma, de la cual podemos decir que ha sido la más animada de toda la temporada pues ha habido lucha hasta el último minuto de prueba.
Las 6 horas de Estoril han marcado el fin de una etapa en las LMS, siendo esta la última prueba que aceptaba coches de la clase LMP1, ya que a partir de 2012 solo serán aceptados los LMP2.
Y es precisamente la clase reina por donde empezaremos, pues aunque el título de constructores ya estaba decidido desde la anterior prueba en Silverstone a manos del equipo Rebelion Racing, el de pilotos y el de equipos estaba en aire siendo una prueba de David contra Goliat entre los dos Lola Rebelion que cuentan con el apoyo directo de Toyota y el Pescarolo Judd.
Y es precisamente la clase reina por donde empezaremos, pues aunque el título de constructores ya estaba decidido desde la anterior prueba en Silverstone a manos del equipo Rebelion Racing, el de pilotos y el de equipos estaba en aire siendo una prueba de David contra Goliat entre los dos Lola Rebelion que cuentan con el apoyo directo de Toyota y el Pescarolo Judd.
En la clase LMP2 la cosa estaba muy fácil para los británicos de Greaves Motorsport, pues solo le faltaba un punto para convertirse en campeones, habiendo conseguido tres victorias en el campeonato que serian cuatro si contamos las 24 horas de Le Mans.
La clase GTE Pro estaba decidida, pues la llegada del Ferrari 458 Italia ha sido determinante para destronar a los reyes indiscutibles que durante algunos años han sido el equipo Felbermayr-Proton y su Porsche, y es que los Ferrari han dominado durante todo el año, siendo el equipo AF Corse el claro dominador y campeón de la citada clase.
En GTE Am la cosa estaba mucho más reñida y la lucha a priori es cosa de los Porsche del equipo francés Matmut y el Ferrari de AF Corse que tratará de convertirse campeón al igual que en la clase Pro.
La otra categoría presente y participante era la Formula Le Mans la cual contaba con 4 equipos presentes, de los cuales el equipo Pegasus Racing, equipo que estuvo mucho tiempo en la categoría LMP2 sin conseguir éxito alguno, y al cual el cambio le ha sentado bien, era el claro favorito teniendo ya en el bolsillo el título de pilotos y el de equipos a un paso.
Y tras este pequeño análisis de cómo estaba la cosa antes de la carrera veamos lo que dio de sí la misma, de la cual podemos decir que ha sido la más animada de toda la temporada pues ha habido lucha hasta el último minuto de prueba.
Así la categoría LMP1 ha sido un 50/50 yendo el título de equipos a Rebelion Racing gracias al punto extra conseguido en la clasificación y el de pilotos a manos de Collard, Tinseau y Jousse del equipo Pescarolo que ganaron gracias a su buena gestión de paradas.
En los LMP2, la pole conseguida por el equipo Greaves le hacía automáticamente ganar el campeonato, lo cual suponía perder un aliciente, al final la victoria fue para el equipo TDS que al igual que Pescarolo en la categoría reina ganaba tras gestionar mejor que ninguno sus paradas en boxes, la tercera posición de esta categoría iba a manos de los portugueses Mello-Breyner con su Norma M200P Judd.
La formula Le Mans tal y como decíamos al principio fue a manos del equipo Pegasus Racing.
La victoria en la categoría GTE Pro se decidio por dos décimas, lo cual nos puede hacer suponer lo que supuso la carrera, siendo una lucha de principio a fin entre el Ferrari 458 Italia del equipo JMW Motorsport y el Porsche de los alemanes Lieb y Lietz del equipo Felbermayr- Proton, siendo al final el coche de la marca italiana el ganador.
La victoria en la categoría GTE Pro se decidio por dos décimas, lo cual nos puede hacer suponer lo que supuso la carrera, siendo una lucha de principio a fin entre el Ferrari 458 Italia del equipo JMW Motorsport y el Porsche de los alemanes Lieb y Lietz del equipo Felbermayr- Proton, siendo al final el coche de la marca italiana el ganador.
La categoría GTE Am fue a manos de los franceses Narac y Armindo del equipo Imsa Matmut en una carrera muy tranquila en la que solo tenían que procurar no cometer errores para conseguir un título que tenían prácticamente asegurado.
Destacar la ausencia de público, siendo la carrera con menos afluencia del campeonato, incluso como menos personas que en las anteriores celebradas en Portimao, la cuales ya fueron consideradas un fracaso por la organización, lo cual nos lleva a hacer una reflexión sobre las pruebas de este tipo de campeonatos que se celebran en la Península Ibérica. crónica y fotos: Antonio Gómez / extremaduraderallyes